Testimonios
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Programa de reestructuración familiar.
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Mi familia estaba pasando por una situación dificil, me decidí a buscar ayuda y el programa de reestructuración familiar en 4 semanas fue mi solución.
Mi punto de vista es bueno, la terapia en lo particular me ayudó a controlar mi carácter, ser más paciete, tolerante y de tener confianza en mis hijos. Ahora sé cómo tratarlos, sé qué debo hacer y cómo hacerlo, me quedó claro que en mi casa, en mis hijos, la autoridad soy yo y que no puedo permitir que mis hijos me manipulen, aprendí que cada integrante de mi familia tiene el deber de ayudar en las tareas de la casa, ahora mi familia ya sabe que cosa debe hacer en la semana.
Yo lo recomiendo a toda persona que como yo, no tenía claro cómo tratar a su familia.
Vanessa Chulim.
mamá 32 años
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Si me sirvió tomar la terapia porque aprendí a conocer a mi mamá y a mi hermano en algunos aspectos, también aprendimos a tener una mejor comunicación, a tener más paciencia y comprensión entre nosotros. Las actividades eran divertidas y a la vez nos enseñaban cosas.
Me gustaron mucho los días que estuvimos aqui, yo si se lo recomendaria a alguna otra persona. :)
Angie M.
Hija 14 años
Si me sirvió mucho, ya no me enojo tanto, ni peleo con mi hermana, del 1 al 10 me sirvió un 8, y me gustó porque hicimos actividades divertidas como familia, y aunque aún nos falta un poco de comunicación y diálogo yo siento que venir si valió la pena, se lo recomendaría a algunos otros de mi familia y a algunos amigos que necesian un poco de ayuda, fue muy divertida la terapia, pero sobre todo me ayudó mucho :)
Alain M.
Hijo 10 años
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Vivir con artritis no era algo fácil de soportar, es increíble la manera que tiene el cuerpo de sanarse a sí mismo, hasta que no lo vives no alcanzas a comprender que tan sabio es el cuerpo y que tan necios somos al no querer escucharlo, me dí una segunda oportunidad, cambié mi forma de tratarme y mi cuerpo me dió una segunda oportunidad, entendí que yo era quien deformaba mi ser y ¡de qué manera! por eso mi cuerpo se deformaba a sí mismo, para que me diera cuenta de lo que me estaba provocando.
Hoy vivo transformada y literalmente mi cuerpo también cambió.
Alejandra Mardónez
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Comencé mi proceso terapéutico, pensando que a mis 56 años ya no había nada para mí, que tras mi matrimonio fallido, mi vida había sido un tremendo fracaso, los hijos, mi carrera desperdiciada, en la terapia me di cuenta de que aún hay mucho que puedo ofrecerme, de hecho la verdadera libertad de vivir, apenas empieza para mí. Gané más de lo que pensé que había perdido, e increíblemente de una forma hermosa me recuperé a mi misma.
Libérate a ti mismo tu también ¡Vales la pena!
Sofia Arriola
Mi pequeño Mateo vive con autismo y al día de hoy ha logrado adaptarse a este mundo al que él no sentía suyo, y yo he logrado adaptarme al mundo de mi hijo al cual yo me sentía ajena y desterrada, hoy somos capaces de comunicarnos, entendernos y aceptarnos, integrados todos, viviendo en un mismo mundo, nuestra familia.
Realmente en muy poco tiempo todos comenzamos a notar el progreso del niño, es increíble lo que se logra con la intervención temprana, yo sentía que todo estaba perdido, pero la terapia nos llenó a todos de vida y de fuerza para seguir adelante como familia, juntos.
Verónica Lauti
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En todo lo que creí que NO era, me encontré, y me di cuenta de que era justo ahí donde por fin encontraría la felicidad, en aceptarme completamente como SOY.
Dejé de pensar tanto para comenzar a sentir y con esto dejé de soñar para comenzar a vivir.
yo tanto que buscaba vivir con sentido, ahora vivo consentido por mí, ya por fin todo tiene SENTIDO, en toda la extensión de la palabra.
Gracias por llevarme de la mano a mi verdadero camino.
Pablo Noh